Joan Sibila, canto vivo contra la minería a cielo abierto

La cantautora oriunda de Huitzilac, Morelos, representa a esos artistas contemporáneos, en cuyas etapas creativas, los golpes de realidad como las problemáticas sociales que impactan a sus comunidades, sus países, sus continentes, calan hondo y es urgente darlas a conocer al mundo a través del arte.

¿Cómo es que pasaste de la música más intimista a hacer canciones por el agua, por la Tierra, por la vida, en Morelos?

Fue de manera muy violenta. Me dedicaba a la música pero en un rollo más espiritual porque era instructora de yoga, pero era muy ajena a la vida política en general; no tenía manera de incidir de ninguna manera. Muy ensimismada en mi viaje, de pronto en 2013 me entero en Morelos del problema de invasión de la mina a cielo abierto en Xochicalco, Morelos.

Me pegó muy duro. Yo, que soy morelense, sentía que se metían a mi casa y a mi jardín. Empecé a escarbar y me di cuenta que no había de otra más que ponerse a hacer algo. Era absolutamente insólito el nivel de devastación que íbamos a presenciar si no lo parábamos, fue muy violento pero también muy natural darme cuenta; ya pasaron 11 años y ahí seguimos en lo que podemos, nos comparte Sibila en entrevista para www.cenzontle400.mx.

A 11 años, sigue la amenaza de los proyectos mineros en Morelos

Poniendo en contexto, en 2013, se movilizaron los morelenses contra el proyecto de la compañía canadiense Esperanza Silver que devastaría la región, pues se trataba de una mina de tajo abierto en los cerros El Jumil y Colotepec.

La explotación de oro y plata contaminaría con cianuro las reservas hídricas de la región, además de liberarse metales pesados en el suelo y aire, envenenando a los pobladores.

Sería en un área de 696 mil 92 hectáreas pertenecientes a la comunidad indígena de Tetlama, del municipio de Temixco, a medio kilómetro de la zona arqueológica de Xochicalco (Patrimonio de la Humanidad). También se destruirá una región de Selva baja caducifolia, un ecosistema extraordinario que contiene diversas especies de flora y fauna endémicas y en riesgo de extinción.

“El estado de Morelos es muy rico en biodiversidad y en él se capta el vital líquido no sólo del mismo, sino de buena parte de la Ciudad de México. Contaminar sus aguas con cianuro y liberar en ellas metales pesados afectará la salud de una gran cantidad de la población mexicana, asimismo, atentará contra la vocación turística del mismo”, de acuerdo con la petición de los morelenses organizados Fuera Minera de Xochicalco, Patrimonio de la Humanidad, en ese entonces.

La amenaza sigue latente 11 años después. Al conmemorar el Día Mundial contra la Minería a Cielo Abierto (22 de julio) en el año 2021 habitantes de Tetlama exigieron a los gobiernos federal, estatal y municipal cancelar el proyecto minero de las empresas canadienses Álamos Gold (antes Esperanza Silver) y Zacatecas Silver, que siguen queriendo explotar en las inmediaciones de la zona arqueológica de Xochicalco.

En 2021, Javier Hernández García, de Tetlama, fue amenazado de muerte en redes sociales por oponerse a la minera. En 2022 se manifestó en el zócalo de Cuernavaca porque “ya están afectando todo el medio ambiente, la tierra, el aire y el agua”. Demandó a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) que no aprobaran a las compañías mineras canadienses el Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA), mismo que les fue rechazado en 2013.

Cantantes del mundo unidos contra la minería

Sibila mantiene cierto vínculo con el movimiento No a la Mina, iniciativa que reunió en un disco, producido en Argentina en 2012, a artistas y referentes de lucha de diferentes regiones del mundo, entre ellos a Manu Chao, La Ventura, Eduardo Galeano, La Renga, Lisandro Aristimuño, Jauría, Adolfo Pérez Esquivel, de América Latina, Europa y Oceanía.

Para la cantautora, en México, hace falta muchísima más participación de los artistas porque es una época extraña donde hay muchas divisiones, además de las ya históricas de un país como el nuestro que nos heredó el capitalismo.

“Yo creo que se han exacerbado las divisiones en esta generación a diferencia de los cantantes del Rupestre -Rafael Catana, Rockdrigo, Nina Galindo, Carlos Arellano, Armando Rosas- que para mí, son un movimiento muy importante de la canción urbana con mensaje social y político, con exigencia de cierta calidad poética y originalidad y búsqueda artística estilística. Ahora hay una merma en los valores de solidaridad y de comunidad sin duda; ya nos pusieron mucho más a competir, no a prepararnos para salir al ruedo y a darle con todo contra todos”, subraya.

La presencia escénica de Sibila es contumaz, nos pone a reflexionar al instante y nos saltan los sentidos más primigenios, basta escuchar El agua vale más, de su autoría, su rola más famosa sobre la minería a cielo abierto en México:

Aquí el informe; no quieren que tú sepas

Minería a cielo abierto es lo que toca explicar

porque es alarma que sofoca de pensar me hierve

las entrañas

Ponte a ver cómo nos ven la cara como si tu vida no importara

magnificas extensiones sometidas a explosiones,

cortan árboles futuro

va a la tierra cruel cianuro

por gramito de oro una tonelada de Pachamama asesinada

al día la mina contamina el agua de una ciudad entera y ¿en la ciudad, nadie se entera?

Pero el agua vale más, porque la vida vale más

Sibila como cantautora independiente debutó en el escenario en 2005. Se ha presentado en diversos foros de las principales ciudades del país; ha grabado tres álbumes: Mérida, Álbum Rosa, De Sueños y Testimonios, y en proceso de grabación, el cuarto: Cresta de Pasión Brutal, con Radio Educación. En su música confluyen trova, rock urbano, sonoridades clásicas, ardor ranchero, lírica renacentista, rítmicas actuales e inspiración indostánica.

¿Cómo defines tu propuesta musical?

Es una búsqueda muy personal. Para empezar fue un viaje muy íntimo, cargado de un rollo místico muy fuerte, después hay una etapa de activismo, que también fue fuerte y luego me he clavado más en lo musical. Empecé desde la poesía más bien, las letras para mí eran eran el eje. Y llegó un momento después del activismo que me quedé sin palabras.

Era un mundo que no había entendido en lo más mínimo ni sabía el nivel de indolencia de inconsciencia que que padecemos como sociedad, y cuando me topé con ello, la neta, sí me dejaron las ganas de escribir.

Me gusta mucho la poesía y la musicalización de la poesía; me encantan el rock, el blues, las rancheras. Estoy grabando justo una maqueta que se llama Cresta de Pasión Brutal, y es una serie de canciones que son súper azotadas; es un género muy dramático.

Sería inexacto definir las facetas de la personalidad de esta cantautora de Huitzilac, pero las respuestas al Cuestionario Proust nos pueden acercar un poco a ella.

¿Cuál es tu idea de la felicidad perfecta?

Libertad

¿A qué persona viva desprecias más?

A quien no se cansa de hacer daño a la sociedad, a la naturaleza. A las personas enfermas de sadismo.

¿Cuándo y dónde ha sido más feliz?

De niña en este jardín de aquí, simplemente sintiendo el sol y ver los arbolitos, y a lo mejor escuchando pajarito.

¿Cuál es tu actividad favorita?

Tocar la guitarra.

¿Cuál consideras que es la virtud más sobrevalorada?

La inteligencia.

¿En qué ocasiones recurres a la mentira?

Cuando me veo muy obligada.