Justicia Gráfica// Vicente Joél Hernández, el Doctor Chaquetín
Se presume, se embolsó 35 millones de pesos en 15 días, de un total de 310 MDP pagado a quien él eligió, esto por medio de un contrato de insumos médicos de elementos perecederos consumibles, es decir incontables y no comprobables, que adjudicó de manera directa y hoy dice que es culpa de la prensa y del Director de Compras del Estado
Antes de ser Secretario de Salud era ozonólogo, se dedicaba a vender la ilusión del ozono a pacientes en condiciones complejas con trastornos crónicos degenerativos que -como traumatólogo- sabe bien, jamás tendrán cura.
Con una moral así de cuestionable, vender esperanza con el conocimiento correcto, ¿Que más se podía esperar de Vicente Joel Hernández Navarro el Secretario de Salud Pública de Tamaulipas?
¿Honor? ¿Prestigio? ¿Lealtad? ¿Buen Juicio?
¡Nada! Hernández Navarro recibió un voto de confianza de quién lo ayudó a obtener el cargo por una sola razón: era doctor y se supone, que entendería las necesidades del gremio, del paciente, de los hospitales, de las consultas de urgencias y de las consultas programadas, de las cirugías y cuidados intensivos. Desgraciadamente para los miles de Tamaulipecos con necesidad del servicio público de salud Vicente Joel Hernández Navarro es el peor Secretario de Gobierno de todo el gabinete actual. No nos queda claro en qué papel es más incapaz o en cuál la rapiña, la ansiedad por robar, lo desborda: si como Secretario de Salud Pública o como Doctor lima callos.
Resulta que luego del escándalo de los 310 millones de pesos que sin concurso o licitación le adjudicó a la Proveedora de Equipo de Laboratorio, Curación y Medicamento MANIFLOSA S.A. de C.V. claro, de ciudad Victoria y que le liquidaron íntegros en 15 días, este remedo del doctor Simi ahora culpa a los periodistas de su ambición desmedida, de su incapacidad técnica para dirigir una Secretaria y de su torpeza para robar sin que nadie se dé cuenta:
“No hay corrupción ni desvío de recursos sobre los 310 millones de pesos adjudicados a la empresa MANIFLOSA S.A. de C.V. tal como ha circulado en algunos medios de comunicación”
Pero el doctor Chapatín versión 4T no paró ahí, sino que dedicó toda su rueda de prensa a culpar a los demás de su fracaso como titular de una dependencia hundida hasta los huesos sin un curita, sin gasas, ni papel higiénico y mucho menos medicamento, no la libró ni el aparato de gobierno del cual él forma parte
“Evidentemente esos 310 (mdp) se trabaja siguiendo la normativa junto con la dirección de compras del gobierno del estado y con la contraloría interna y contraloría del estado, siguiendo todos los procesos…la parte técnica de la dirección de compras nos señala las circunstancia por el tiempo y por algunas necesidades de papelería de proveedores que no se puede hacer una licitación, pero no pasamos a una adjudicación”.
Vea usted el tamaño de la mentira de este sujeto “No se licitó pero tampoco se adjudicó” es un juego de palabras engañoso, a ver médico de flatulencias no nos trates como idiotas porque no lo somos, cuando no hay licitación entonces se adjudica de forma directa al proveedor, así es y no hay vuelta de hoja, no hay medias tintas.
Urge saber cuál criterio utilizaste tú y tu encargada de compras Dora Oralia Valdez Sosaya, quien brillo por su ausencia de la rueda de prensa y dicen, también de la Secretaria pues seguramente ya puso pies en polvorosa aunque su jefe inmediato presume de no estar sujeto a ninguna investigación de la Fiscalía Anticorrupción y claro, ¿Con permiso de quién el fiscal a modo, el fiscal del régimen, avanzaría en contra del doctor en cuestión?
Hernández Navarro también involucró en este negocito de 310 millones de pesos al Director de Compras del Gobierno del Estado Ing. Porfirio González Reyes, de igual forma metió en el escándalo a otros servidores públicos como el Contralor, y poco le faltó para señalar a otros funcionarios de su nivel ¡vaya! corrupto, mentiroso, negligente y delator ¡Lindo combo el del doctor Chaquetín, digo, Chapatín!
Pero si usted cree que Vicente Joel Hernández ya terminó consigo mismo se equivoca, aún hay más, resulta que las várices cerebrales del doctor Chaquetín Hernández Navarro le impidieron realizar una entrega – recepción con la Secretaria más cuestionada y tranza de Cabeza de Vaca; la ¡¡de Salud Pública!!
Dice Vicente Joel Hernández que “Tardó 2 años en encontrar un equipo médico comprado por la administración anterior” y que para cuando lo halló estaba ya más mohoso y e inservible que su parte humana más pequeña.
El doctor saca flemas está admitiendo que fue omiso en un acto administrativo, toda vez que la ley le confiere hasta 2 meses para inconformarse con la entrega recepción de una institución, al no hacerlo está admitiendo que lo recibido es verídico y correcto.
La omisión como la acción es un delito.
¡Ay don Chente, somos, pero no tanto!
Y eso de culpar a los medios de comunicación no es algo que usted tenga la capacidad de hacer porque verá;
La incertidumbre gubernamental que genera el estado mexicano en estos momentos, sumado a la ausencia de credibilidad y confianza del pueblo hacia la clase política, logran configurar un repunte de interés ciudadano hacia los periodistas que generan opinión.
¿Bueno, malo o menos peor? No es el tema, la cuestión aquí es la situación de zozobra, miedo e incertidumbre que usted genera en la población que necesita atención médica eficiente, expedita, integral y pública.
Esta clase de Tamaulipecos, justamente son los que buscan la opinión periodística, la opinión, no los boletines que usted hace circular pretendiendo con eso, cubrir sus negocios millonarios, turbios y llenos de mentiras donde seguramente a usted le queda ¿Cuánto de 310 millones? ¿35 millones de pesos? Vamos doctor, si usted fuera el paciente ya se nos habría ido de lo pálido que se le vio en la rueda de prensa.
Lo mejor que puede hacer es renunciar, en caso de que le permitan hacerlo sin ser procesado.
Nos leemos la próxima vez.
