• Confía en que, al momento de aplicar la ley, se van a corregir viejos vicios, combatir la corrupción y ordenar concesiones
El diputado Ricardo Monreal expresó su confianza de que al momento de aplicar la Ley General de Aguas se van a corregir viejos vicios, a combatir la corrupción y a ordenar la expedición de concesiones, prohibiendo el acaparamiento y la monopolización, la venta ilegal del agua en todas las comunidades del país. “Ya lo veremos”.
Al participar en la discusión del dictamen que expide la Ley General de Aguas y reforma la Ley de Aguas Nacionales, el presidente de la Junta de Coordinación Política enfatizó que “estamos recuperando al agua para que no se privatice, como ya empezaba a hacerse en muchas partes del país”.
Dijo que ha sido este un debate intenso, pues después de 24 horas, 178 oradores en esta tribuna, es complicado aceptar como estrategia partidista “que no se escuchó a quienes están en desacuerdo con esta ley. Ha sido un debate amplio, por momentos difícil, de contrastes, y que en lo personal a mí no me sorprende”.
Agradeció a los coordinadores del PAN, Elías Lixa; del PRI, Rubén Moreira; del Partido Verde, Carlos Puente; del PT, Reginaldo Sandoval y de MC, Ivonne Ortega, “porque nos escucharon para reencauzar el debate y eso se agradece; había todavía 60 oradores y eso nos hubiera llevado a sesionar toda la tarde y parte de la noche. Y eso me parece que debo de destacarlo y reconocerlo”.
Asimismo, agradeció a la presidenta de la Mesa Directiva, a los vicepresidentes y vicepresidentas, a las secretarias y secretarios, y a los medios de comunicación que cubren la fuente. “A todos les puedo expresar: los que vamos a votar en favor nos asiste la razón jurídica, política, social y moral y vamos a ver los resultados pronto de este profundo instrumento jurídico para la nación mexicana”.
Monreal Ávila resaltó que analizando cada artículo modificado y argumentando lo que se ha hecho en favor de la población, “hemos situado al agua como el valor más preciado de la nación, elevado a rango legal la prohibición del acaparamiento de títulos de concesiones y estableciendo una política en el manejo del agua bajo la rectoría del Estado nacional”.
Estimó que el debate ha sido importante; “por momentos la pasión desborda y por momentos el insulto sustituye a la razón y al argumento, pero luego tenemos que retomar nuestra responsabilidad y creo que México nos une y nos identifica”.
“Que haya diferencias está bien, no debe a nadie extrañar. Que haya puntos de vista encontrados también es natural en una democracia. Yo prefiero mil veces que sea en estos centros de deliberación donde se expresen las posiciones más radicales o más sensibles que tenerlos en otros espacios de clandestinidad. Aquí es donde todos debemos deliberar, discutir y acordar las reglas de la conducción institucional del país”, puntualizó.
El también coordinador del grupo parlamentario de Morena externó su saludo a la titular del Ejecutivo Federal, a la presidenta Claudia Sheinbaum, porque es la autora de la iniciativa. “Durante casi 12 o13 años, después de la reforma constitucional, nadie se había atrevido a enviar una iniciativa de tal magnitud”.
“Por eso las 24 horas que tenemos debatiendo y que hemos dedicado al análisis y discusión de estos dos instrumentos jurídicos son poco, relacionados con el profundo interés nacional que reviste”, subrayó.
