Justicia Gráfica // Armando Martínez traiciona a Villarreal

• Sigue parado el tráfico de Huachicol en Estados Unidos hacia México.
• Un millón de pesos en publicidad semestral gasta la Senadora Olga Sosa Ruiz.

El que traiciona una vez, lo hace muchas otras más, y Armando Martínez Manríquez no es la excepción, al contrario:

Todo apunta que con tal de salvar su arrugado pellejo con olor a contrabando, el alcalde de Altamira se movió rápido con sus conectes partidistas y políticos para deslindarse de las abrumadoras responsabilidades y señalamientos por permitir el tráfico de hidrocarburos ilegales y armas en su municipio, y el buque tanque es la mejor evidencia.

Pero Armando Martínez no solo se deslinda, también se victimiza con los dirigentes de su partido e intenta hacer llegar el mensaje a la jefa del Poder Ejecutivo Nacional, culpando al gobernador del estado, al jefe de la oficina de éste y a otros cercanos a Américo Villarreal Anaya, tergiversando las cosas en tono de “me instruyen”.

Nuestra fuente confiable nos revela una verdad calada hace unos 3 años, cuando Martínez Manríquez se desvivía en atenciones con el doctor Rodolfo González Valderrama, delegado en aquel tiempo de programas federales de desarrollo para Tamaulipas, y después pre candidato a la gubernatura, interna en la que contendió con el doctor Américo Villarreal Anaya.

 Un día de primavera Armando Martínez decidió que era el momento de cambiar de amigos y sin más le dio la espalda a Rodolfo González Valderrama, traicionándolo para favorecer a AVA.

Y cosas de la vida, ahora traiciona a AVA para salvarse él mismo.

Así funcionan las cosas con este alcalde bribón, porque no solo falta a la verdad -como niña de kínder endilgando su responsabilidad a otros-, sino que lo hace porque quiere ser Diputado Federal, para de ahí buscar la gubernatura de Tamaulipas.

Ese es el alcalde de Altamira Armado Martínez, el que tira la piedra y esconde la mano, y sus compañeros de partido deben tener mucho cuidado con él porque es traidor… y Rodolfo González Valderrama es el mejor botón de muestra.

 Parece una inocentada, una ocurrencia esta actitud de Martínez Manríquez pero cuidado, es un tema álgido el del huachicol, de hecho ahora mismo que está en investigación por Estados Unidos a tal punto que su tráfico está frenado, ni pipas ni barcos ni nada que contenga los hidrocarburos señalados puede pasar hacia México.

Algunos señalan que la medida tiene más de 15 días de haber sido aplicada, y otras valiosas fuentes de información señalan que no es así, que son horas en función y que se desprende de la investigación del buque tanque incautado en Altamira la semana pasada.

No importa el orden, sino el hecho y lo que indica es una separación de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo con el obradorato, y también abre la posibilidad de la entrega de políticos huachicoleros, como Armando Martínez, el alcalde del puerto donde ordeñaban el hidrocarburo ilegal.

 Tenga cuidado, señor gobernador Américo Villarreal, porque este loquito alcalde de Altamira cree que es la única opción viable para Tamaulipas, y se está moviendo, aunque lo arrastre a usted en sus intentos estériles hasta ahora.

 Hablando de locuras y ocurrencias lo invito a tomar calculadora y su Facebook en mano, para que visite algunas páginas charras, sin periodistas de verdad, de renombre que las respalden, porque son estrategias de marketing inmoral.

Estás páginas charras se ubican en esta red social y en ellas Olga Sosa Ruiz basa su precampaña y bueno, encontrará la inversión publicitaria que la senadora de la República hace mes con mes desde el año pasado.

Olga Sosa pagó 267 anuncios a partir de septiembre del 2024 y hasta Marzo de este año, entre 774 mil 438 y 919 mil 688 pesos.

Son cifras aproximadas, según los tabuladores de costos publicitarios de este tipo de cuentas de redes sociales.

 Vaya si tiene dinero la senadora Olga Patricia Sosa Ruiz, nada más que un millón de pesos en 7 meses, para promocionar sus visitas a Don Cuco Bots, a ejidos a donde lleva unos fritos con frutsi, o a eventos como el de la Ministra Lenia Batres, donde edita su lugar en el evento porque no ocupó un espacio en el pódium y ni siquiera la invitaron a la comida posterior a la formalidad, por supuesto que tiene anuncios vigentes publicitando que ella está más que lista para gobernar Tamaulipas, porque repartió un trapeador, una escoba y un clorito a las familias sepultadas en lodo luego de la tromba en Reynosa la semana pasada, en lugar de enviar retroexcavadoras y defender a las víctimas de la negligencia del alcalde Carlos Peña desde su curul en el Senado.

Y falta contemplar la inversión de la senadora en medios serios para desarrollar su campaña de choque, lo cual resulta una encomienda mucho más cara.

¿De dónde sale este gasto, señora senadora?

Algunos compañeros periodistas dicen que de las mismas entrañas del estado, pero yo no tengo ni un solo elemento para afirmar que esto sea así, ni uno solo.

Señor Gobernador, es tiempo de quitarse de encima este fuego amigo que lo mina, que lo opaca, que entorpece su plan de gobierno, a menos de la mitad de su período, desde gente adelantada y desbocada como la muy cuestionable señorita Sosa Ruiz, hasta secretarios torpes como el de Salud, Vicente Joel Hernández Navarro, y la inútil Lucia Aimé Castillo Pastor, sin olvidar a esa culebra prieta de Altamira, Armado Martínez Manríquez.

Imagínese usted, qué no dieran estos personajes por ocupar su espacio ¡aunque sea 3 años!

En Tamaulipas se necesita lealtad, valor y honestidad a este gobierno, por cierto, proyecto de todos los referidos en sus orígenes, lo cual al parecer, ya olvidaron.

Nos leemos la próxima vez.