Justicia Gráfica // Olga Sosa Ruiz arañó, empujó, mordió y manoseó por la foto con Sheinbaum

Por. Sofía Pacheco

En estos tiempos cuando la desacreditación pública sostenida con evidencias irrefutables no basta para detener la carrera política del ladrón, del sinvergüenza, del político que pacta con mafiosos, con terroristas, incluso a sabiendas que éstos secuestrarán a sus votantes, envenenarán y/o someterán a cuotas mortales al pueblo que creyó en ellos, vemos en cada gira populista de Claudia Sheinbaum Pardo asomarse las caras de este tipo de politócratas es decir, gente que ocupa un cargo público sin un merecimiento laboral digno, calienta sillas les dicen en mi pueblo.

La presidenta al menos puede referir las acciones policiacas y jurídicas que ha realizado a petición puntual de Donald Trump: laboratorios complejos de Fentanilo y otras drogas que Andrés Manuel negaba, hoy están destruidos.

Patios y bodegas de huachicol donde se almacenaba y distribuía el combustible ilegal, también han sido asegurados, y ni que decir de la red más grande de este tipo de tráfico criminal donde el secretario de Marina con AMLO, Rafael Ojeda y sus dos sobrinos el contralmirante y el vicealmirante Fernando y Manuel Roberto Farías Laguna están involucrados.

Esta red de tráfico de huachicol sería una acción tremenda de seguridad en beneficio a la imagen de Sheinbaum, si tan solo llegara con efectividad a los políticos involucrados en el derroche millonario que los contrabandistas estructuraron y pagaron pie juntillas con cada atraco naval a la zona conurbada de Tampico, Madero y Altamira.

Aunque Sheinbaum aseguró en su mañanera que llegará “hasta donde tope” la investigación por huachicoleo en Tamaulipas, es evidente que este “saneamiento” tiene sus límites mientras que lo correcto, lo decente, lo justo se vuelvan a joder para proteger al ex secretario de Marina, con toda viabilidad a Alfonso Romo el lavador oficial de dinero ilegal, al propio expresidente y de paso a los alcaldes sobornados por los aduanales mafiosos.

Esto solo hablando del tráfico de un año y medio que refiere el ex director de la Aduana de Tampico Capitán Alejandro Torres Joaquín conocido bajo el seudónimo de “Santo” bajo el programa de testigo protegido de FGR.

Sin embargo, faltan 5 años de vida huachicolera de la cual salieron las carreras políticas de varios arribistas politócratas como el alcalde de la capital de Tamaulipas Eduardo Gattas Báez con su camioneta blindada de lujo a nombre de Sergio Carmona Angulo El Rey del Huachicol.

Hablando de Sergio Carmona no podemos omitir el nombre de la actual Senadora Olga Sosa Ruiz quien mordió, arañó y empujó a todo hombre, mujer o quimera que se le pusiera en el camino para llegar a la tan anhelada foto con Sheinbaum, ahí se puso ella con su sonrisa que parece verdadera, legítima, genuina, intentando tocar cachete con cachete a la presidenta Claudia.

¿Pensará la Senadora, cuya madre -según su propio dicho- compró un millón y medio de dólares en la casa de lavado de dinero Vector, -lo señala el Departamento del Tesoro norteamericano-, propiedad de Alfonso Romo, que las fotos con Sheinbaum la santificarán? ¿Que lavarán su sombría relación cercana con Sergio Carmona Angulo? ¿Que borrará el financiamiento del Rey del Huachicol en su campaña electoral, perdida en 2021 para la alcaldía de Tampico, pagando millones de pesos a artistas como Julión Álvarez quien cerró las campañas de ella y de otros políticos improvisados que la hoy Senadora operó?

Olga Patricia Sosa Ruiz sabe que un millón y medio de dólares no es lo único que guarda bajo el encubrimiento familiar de primera línea.

La Senadora en cuestión sabe que hay más dinero ilegal, más acciones inmorales, más mentiras y más encubrimiento de ella y de su primera línea familiar.

También debe estar consciente que en su caída arrastrará a varias personas incluyendo sus actuales amigos financieros sin importar que tan encumbrados se encuentren estos en la política del estado.

 Si están ordeñando dinero del erario para su precampaña, aunque de hecho ya lo hicieron, saldrá a la luz pública con nombres y documentos, basta de mofarse del pueblo que es a donde debe llegar el dinero que desvían para sus intereses personales de cara a la sucesión estatal.

Olga Sosa usted debería ponerse a trabajar en el Senado de la República que es a donde la sostenemos los ciudadanos con nuestros impuestos, para que elabore iniciativas, reforme leyes, incremente penas contra el secuestro, desaparición forzada y extorsión, que son los delitos que más nos pegan a los Tamaulipecos. Póngase a trabajar con efectividad, defendiendo y logrando presupuestos especiales del gobierno federal para la identificación de víctimas del crimen organizado, no basta una pala y un pico para ir sacando huesos. Se necesita dinero para la identificación genética, laboratorios y más laboratorios.

  ¿Por qué usted es tan indolente con las madres que no saben dónde están sus hijos desaparecidos por ese crimen que usted al no combatir, abraza?

 Supongo que su falta de empatía obedece a no haber formado una familia santa, cristiana, con un marido y varios hijos, usted es como un parque de diversiones muy caro, pero solo eso, de modo y manera que no puede replicar el sentir de una madre buscadora, o de las y los jefes de familia que todos los días salen a la calle para el sostén de su hogar, con el peligro constante, latente, de ser extorsionado, secuestrado, muerto o todo lo anterior al mismo tiempo.

Usted no debe ocupar un cargo que va más allá de lo administrativo, un lugar que requiere ciertos valores y los zapatos reales de las familias Tamaulipecas.

Mientras tanto ¡Póngase a trabajar legislativamente que para eso le pagamos!

Nos leemos la próxima vez.