Organizaciones culpan al gobernador Cuitláhuac García de represión y asesinato de defensores del agua en Totalco, Veracruz
Colectivos ambientalistas y campesinos culpan al gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, de ser cómplice de empresas transnacionales por solapar el abuso policial durante la persecución, el desalojo con violencia y asesinato de dos defensores del agua de los ejidos de la comunidad de Totalco, en el municipio de Perote, el pasado jueves.
Una muestra más de la guerra por el agua entre empresas transnacionales y comunidades por la injusta distribución por parte de los gobiernos estatales sucedió el pasado jueves en Veracruz, con saldo de dos defensores asesinados y varios heridos.
Luego de que los defensores del agua de la Cuenca Libres-Oriental bloquearon el acceso a las Granjas Carrol, de ganado porcino, elementos de la Fuerza Civil de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz persiguieron a algunos de los activistas hasta sus hogares, entraron y los golpearon, y dispararon por las calles de Totalco, donde quedaron regados casquillos de alto calibre.
Resultando asesinados los hermanos Jorge y Alberto Cortina Vázquez, de 37 y 29 años, respectivamente. Y su padre, al enterarse de que sus hijos fueron acribillados, murió de un infarto fulminante.
Retuvieron a autoridades estatales a cambio de tres uniformados y el retiro de Granjas Carroll
En respuesta a esa agresión, los habitantes de Totalco bloquearon por 24 horas las carreteras aledañas a la localidad, incluida la que comunica a Acatzingo y Perote. El viernes por la tarde acudieron a la zona a negociar el desbloqueo de las arterias viales Sergio Ulises Montes Guzmán, subsecretario de Gobernación, y el alcalde de Perote, Delfino Ortega Martínez, sin embargo, fueron retenidos por más de ocho horas.
A cambio de su liberación, los habitantes exigieron detener a tres policías de la Fuerza Civil estatal señalados como responsables de haber “ejecutado de manera extrajudicial” a los hermanos Alberto y Jorge Cortina, que reclamaban el derecho al agua para los ejidos de Toatalco, y el retiro de la empresa Granjas Grill quitándole el permiso de uso de suelo.
Montes Guzmán aclaró que no era posible acceder a sus demandas de entregar a los elementos policiales ni tampoco que se fuera la transnacional Granjas Grill porque las concesiones para operar son federales. El funcionario estatal se comprometió a indemnizar a las viudas de los hermanos asesinados, y ellas respondieron que eso no resolverá el conflicto.
“¡Que se largue Granjas Carroll, ahora menos los queremos aquí, ellos también son responsables de la muerte de nuestros compañeros!”
Habitantes agredidos de Totalco
Aseguraron que fue un operativo planeado, ordenado. “Ellos venían a matar y sabían contra quiénes iban, sabían quiénes eran los líderes del movimiento, por eso iban contra ellos“. Y que tendría que aclararse la presencia de la Guardia Nacional, que permitió ese ataque contra civiles por parte de la policía estatal.
“Nuestros niños se metían debajo de las camas, estaban llorando, gritando y ahora tienen miedo“, acusaron mujeres que vivieron la brutal agresión de los uniformados que se metieron a sus casas.
Cuitláhuac García, cómplice de transnacionales e indolente ante el abuso policial
Organizaciones ambientalistas culparon al gobernador de Veracruz de encubrir los abusos de sus elementos policíacos y ser responsable de los asesinatos de los tres defensores del agua de Totalco, por defender a las empresas por encima de los derechos de los habitantes.
“Este acto de violencia ha resultado en varios heridos y la trágica muerte de tres defensores del medio ambiente”, dijeron en el posicionamiento firmado por Raíces del Camellon en Resistencia; Cultura Errante; La Asamblea Veracruzana de Iniciativas y Defensa Ambiental; Red de Resistencia y Rebeldía en Apoyo al CNI-CIG del Puerto de Veracruz; Colectivo La Voz del Anáhuac-Sexta en Rebeldía;Pobladores AC; Alianza Internacional de Habitantes Latinoamérica; Centro de Desarrollo Rural Quetzalcoatl y Colectiva Mujeres que Luchan.
“Su falta de acción y respuesta efectiva solo reafirma su complicidad con los intereses corporativos, priorizando los beneficios de grandes empresas sobre los derechos y el bienestar de las comunidades campesinas”.